Emotivo homenaje

Desde Orduña (Bizkaia), Xabier Egiluz Isusi nos remite este interesante artículo en el cual nos presenta la figura de Bihotza, un relevante txistulari en el pasado y un icono en la actualidad de esta ciudad de gran impronta txistulari.

Emotivo homenaje de los txistularis de Getxa Goi y de la comparsa Bihotza al que fue tamborilero municipal de orduña D. Pantaleón Aguinaga Olabarria Bihotza

Al cumplirse el pasado catorce de febrero los ciento diez años del fallecimiento del que fuera tamborilero de la ciudad D. Pantaleón de Aguínaga Olabarría, más conocido con el sobrenombre de Bihotza, los txistularis de Getxa Goi y la comparsa de gigantes y cabezudos Bihotza Konpartsa de Orduña quisimos dedicar un día especial a la memoria de tan singular personaje y recordar la huella que dejaron en la ciudad sus cuarenta y siete años de servicio activo como tamborilero municipal; animando los diferentes festejos populares y dando empaque a los actos protocolarios civiles y religiosos a los que habitualmente acompañaba con su txistu y tamboril. Tanto animaba y tan recuerdo dejó en la ciudad, que ha día de hoy el txistulari Bihotza, eco de aquel D. Pantaleón, se ha convertido en el muñeco de fiestas, al estilo de Celedón en Vitoria y Marijaia en Bilbao.Para la celebración de las efemérides se eligió el domingo 17 de febrero, por ser el domingo más cercano al de su fallecimiento, un 14 de febrero de 1909.

Con un tiempo espléndido y un buen ambiente callejero, los txistularis de Getxa Goi iniciamos la kalejira por el centro de la ciudad en dirección a la sede de Bihotza konpartsa, sita en la calle Cantarranas, la cual ya se hallaban dispuestos el gigante Bihotza y el resto de la corte (gigantes y cabezudos) para el desfile.
Desde allí, la figura del txistulari Bihotza abriendo la marcha y secundado, en este orden, por los txistularis de Getxa Goi, los cuatro gigantes Dantzariak, y por un grupo de revoltoso cabezudos; circundamos toda la Plaza de los Fueros de la Ciudad y nos dirigimos al edificio nº 8 de la calle Burgos kalea, vivienda en la cual residió nuestro tamborilero Pantaleón Aguínaga, y en cuya fachada resalta la placa conmemorativa del centenario de la muerte, señalando el lugar de residencia del mismo.

 

Para el acto, una de las pocas fotografías que disponemos de Bihotza, a tamaño natural, y colocada sobre un poyato cubierto con el escudo de armas de la ciudad, ocupaba parte de su fachada.
Tras los sones de un zortziko ejecutado por nosotros los txistularis, obra obligada que fue en la oposición a la plaza de tamborilero municipal que dejo vacante Bihotza en 1909; Aitor Pascual, presidente de la Bihotza konpartsa, hizo una amplia semblanza de la persona y del personaje, recordó la fundación y actividades de la comparsa, y expresó su satisfacción por mantener vivo el recuerdo de esta singular persona, símbolo de la fiesta en Orduña.

Tras las palabras de recuerdo, al ritmo de los acordes del Alkate soinua de D. Pedro Fdez. de Aguirre, nuestro incombustible compañero txistulari y medalla de plata de EHTE. Joseba Larrieta depositó un ramo de flores ante la imagen del tamborilero homenajeado.

Como broche final al acto, y rememorando tiempos de nuestro personaje, los cuatro gigantes dantzariak ejecutaron diferentes bailes ante la casa del popular tamborilero Bihotza.

Sin embargo no acabo allí nuestra labor, en un envidiable ambiente festivo tuvimos la oportunidad de seguir dando color y alegría a las calles de nuestra ciudad con los trinos de nuestros txistus, el redoblar de los tamboriles y las danzas de los comparseros, al igual que lo hacía nuestro recordado Pantaleón Aguinaga Bihotza un siglo antes.